Varapalo judicial al Pontevedra Club de Fútbol. Cuando todo lo deportivo está yendo viento en popa, la parte societaria tiene palos en el camino. El último ha venido desde el Juzgado Mercantil Número 1 de Pontevedra que ha declarado la ampliación de capital del Pontevedra Club de Fútbol Sociedad Anónima Deportiva como nula.
Esta decisión ha venido provocada por la denuncia del grupo opositor, capitaneado por las empresas Congelados e Conservas Marabal SL e tamén de Investimentos y Gestión Alimenticia SL., a la actual dirección de la entidad. El fallo judicial, tal y como cuenta hoy PontevedraViva, indica que no se han seguido los pasos correctos al dotar al Consejo de Administración la potestad de convocar una ampliación de capital en el tiempo y forma que se convenga y se pueda realizar. Al parecer, según el auto y los demandantes, según la ley que rige las actividades de las sociedades anónimas, todos los accionistas tienen derecho a una información previa de las decisiones que se vayan a tomar durante las asambleas, cosa que al parecer no ocurrió en esta ocasión y que ha provocado la anulación del acuerdo tomado.
Pese a dar la razón a la parte demandante y condenar a pagar las costas del proceso al Pontevedra CF, el juzgado de lo mercantil destaca la mala fe de la parte demandante al impugnar la decisión debido a las necesidades de capital que tiene en estos momentos la entidad: «coñecerían perfectamente a necesidade do Pontevedra CF de proceder a unha ampliación de capital, pois iso sería imprescindible para o sostemento da entidade e para evitar que incorra en causa de disolución»
Según cuenta el medio digital, en el Pontevedra CF se respira tranquilidad ya que, además de ser la decisión del juzgado recurrible, este hecho es solo un defecto de forma que se arreglará en la próxima Junta de Accionistas. Aunque la entidad no lo ha comentado, si no se recurre la decisión judicial es más que probable que se tenga que reiniciar el proceso de ampliación de capital, dando la opción a más accionistas de participar, con los consecuentes nuevos plazos que se necesitan para completar el proceso.